Diferentes
personas me han hecho un mismo comentario: cuánta gente guapa hay en las
acampadas. Yo opino lo mismo. Cuando estoy allí, miro a mi alrededor y veo mucha
gente bella: hombres, mujeres, jóvenes, personas mayores… imagino que tiene que
ver con que la ilusión se refleja en sus rostros así como con la alegría de
estar construyendo un mundo mejor, un mundo, que como ha dicho estos días
Eduardo Galeano, se está gestando en la barriga de este mundo actual que es
bastante asqueroso.
El
viernes por la tarde, las plazas y calles de España se llenaron aún de más
belleza. Y es que, frente a la brutalidad nauseabunda, indigna e inhumana de
los Mossos d’Esquadra y los políticos que les dan las órdenes, la respuesta de
las personas de bien fue acudir a las manifestaciones con flores. Flores en el
pelo, flores en las solapas, flores en las manos. Porque nuestras armas son las
palabras, la razón, la justicia, los argumentos y contra su violencia física y
estructural –porque también es violencia reducir el gasto presupuestario en
Sanidad y Educación mientras que el sr. Mas sube el sueldo de sus cargos de
confianza 12.000 euros- nosotros ofrecemos flores. Qué gran lección de
dignidad. Y allí seguimos, en la acampadabcn, sin miedo.
Arcadi
y yo aprovechamos que estábamos por allí para ir a la perfumería y perfumarnos
para que luego no digan que si manifestantes huelen mal que si la insalubridad
y todas esas cosas.
Es una vergüenza lo que ocurrió ayer, pero es admirable la actuación de los indignados y de todas las personas que estuvieron allí luchando y sufriendo para conseguir un mundo mejor para todos!
ResponderEliminarYa ves Sonia, qué podemos esperar de unos políticos que se masturban pensando en el mercado de valores.
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